viernes, 19 de marzo de 2010

Excesos


Acabo de volver de ver la maravillosa película "An education" - que he disfrutado desde el primer flash de los créditos iniciales hasta el último acorde del tema de los créditos finales- y de tomarme unos gintonic con dos personas que son de aquel tipo de tal que uno no puede sino agradecer a la vida que las haya puesto en el camino de uno.
O sea, que tal vez peco de excesivo en este post...pero lo que pasa es que ahora mismo me da igual, porque en el fondo tampoco es tan grave; al fin y al cabo uno ya va acostumbrándose a ser lo que es. Como dice Caetano "...cada um sabe a dor e a gloria de ser o que é..." y a veces esos polos no son tan distantes como a uno le parece.
En fin...
A lo que iba. En la furia "actualicemos el blog AHORA" de ayer, pongo un trabajo que hice hará unos meses respondiendo a la invitación de SocialDesignZine para crear un cartel de soporte a la oposición al fraudulento gobierno iraní donde creo que ese mismo rasgo de tendencia al exceso que a veces identifico en lo que hago -y por extensión en lo que soy, tal vez debería añadir y en lo cual incluyo estar escribiendo esto mismo ahora - se manifiesta claramente.
Y fui consciente de ello durante el proceso porque no conseguía alejarme de la truculencia y el impacto visceral. Pero es que es lo que me salía. Cualquier otra aproximación más limpia y elaborada conceptualmente al conflicto al que me estaba refiriendo en ella se me antojaba aséptica e imparcial.
No digo que no sea posible hacerlo, basta con mirar la web donde se exhiben los posters, donde entre me atrevería a decir que entre una mayoría de trabajos de standard estudiantil emergen algunas aproximaciones al tema conceptualmente elaboradísimas aunque representadas con una meridiana y bellísima claridad.
Pero a mí no me salía.
Así que tuve que elegir entre callarme o levantar la voz aunque hiciera un gallo, decidiéndome por esto último, a pesar de saber que no me gustaría mucho ver lo que me había salido en relación con algunos de los otros trabajos que aparecerían rodeando el mío.
Excederse no es generalmente una buena opción... pero callarse cuando no hay que hacerlo, menos. Decididamente.
Así que, para bien o para mal, ahí queda eso.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Que bó que hagis tornat Pep. Ja estaves tardant massa. Aquí s'aprèn molt.

Cuentos de Antiguamente dijo...

Precioso, Pep!!!
Muy fuerte la imagen.
Y el texto también!
Abrazo